MIMOSAS (2016) del director Oliver Laxe –el
título también es un reto a la razón, como la propia película- no sé mucho qué
es y, tan hermosa, maldita la falta que le hace: una de aventuras, un
western a lo Peckinpah, una road movie a caballo... y en grand taxi, un documental del Alto Atlas, una peli indie de mística sufí, una fábula atemporal sobre la fe, no sobre
la religión, dos películas en una…
Está rodada entre las montañas del
Atlas, el Anti Atlas y el Sahgro, a la entrada del desierto: son fácilmente
reconocibles el lago de Ifni en el Toubkal o las gargantas de Achaabou en el
Mgoun. Y Ouarzazate, Oukaïmeden, Skoura, Tinghir…
Es la segunda cinta del director
gallego y obtuvo el Gran Premio de la Semana de la Crítica del Festival de
Cannes 2016. Laxe, nacido en París, es un profundo conocedor del sur marroquí
donde ha vivido.
Ahora está en otras
cosas: “Hoy estoy en un proyecto de castañas, de agricultura ecológica, restaurando
la casa de mis abuelos”.Una larga conversación con Oliver Laxe en Jot Down. No es un spoiler.
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